Las altas capacidades no son una moda. Son una situación que viven muchas personas. No sabemos cuántos son porque en ninguna parte están todos identificados. Los entendidos creen que podemos hablar de que existen un 20% de personas con altas capacidades; aproximadamente un 2% de personas con superdotación, y aproximadamente un 15-18% de personas con talentos. Estamos infiriendo estos datos pero cuando hacemos predetección a un grupo clase se confirman estos datos.
Es muy importante que las personas con altas capacidades
sean identificadas para recibir cuanto antes la ayuda necesaria para atender
sus necesidades específicas. Cuando hablamos de altas capacidades hablamos de
personas neurodivergentes. Son peculiares, son especiales... muy intensos y
diversos. Las personas de altas capacidades no son un colectivo homogéneo. No
todos tienen las mismas características y por eso son difíciles de identificar.
Hay mil maneras de tener altas capacidades. Hay una serie de características
que comparten muchas de las personas con altas capacidades. Serán las
protagonistas de próximos escritos en el blog. Las personas que tienen altas
capacidades necesitan ser identificadas lo antes posible para poder empezar a
trabajar con tiempo, para que puedan llegar al final de la escolarización en
las mejores condiciones posibles.
Necesitamos, como sociedad, identificar estas personas. Da
igual la edad que tengan. Ellos y ellas pueden cambiar las cosas, pueden
descubrir nuevos remedios para enfermedades, pueden encontrar nuevas maneras de
hacer las cosas... no podemos permitirnos como sociedad que las personas con
más posibilidades no desarrollen sus talentos. Algunos quizás conseguirán hacer
las mejores comidas, los mejores poemas o los mejores ramos de flores; no todos
tienen que ir a la NASA sobre todo si no quieren ir... Que sean la mejor
versión de ellos mismos nos enriquecerá a todos. Por egoísmo social, y por
necesidad ética y moral tenemos que conseguir que sean ellos mismos y tengan
atendidas sus necesidades.
Hay mil dificultades para llegar al 100% de identificados
pero merece la pena hacer el esfuerzo de sensibilizar la sociedad y hacer la
predetección de los niños y jóvenes de altas capacidades. A partir de la identificación
de los hijos se suelen identifican también los padres, tíos o abuelos. Nos han
hablado de la certeza científica de que en las altas capacidades hay un
componente genético y una parte de ambiente-entorno-aprendizaje. Cuando los
adultos confirman sus altas capacidades encuentran respuesta en las dudas, a la
impresión de ser diferentes de los otros y extraños. Encajan sus piezas.
Recolocan sus experiencias vitales.
La predetección nos dice si tenemos que identificar a la persona. No está basado en el éxito académico. Se tienen en cuenta como aprenden, como viven, como se expresan, como sienten... Partimos de la información que tienen los padres y ellos mismos, a partir de Quart de Primaria. Tienen mucha información cualitativa. La predetección se hace a través de los cuestionarios de la Dra. Luz Pérez de la Universidad Complutense de Madrid que están traducidos al catalán y los encontramos al dosier de “Las altas capacidades: detección y actuación en el ámbito educativo” del Departamento de Enseñanza de la Generalitat de Cataluña en 2013. Nosotros añadimos una entrevista de anamnesis con la familia y los cuestionarios. Con estos datos tomamos la decisión de informar a la familia de la necesidad de hacer la identificación de altas capacidades para confirmarlas o no.