jueves, 25 de febrero de 2021

¿Cómo quedan reflejadas las altas capacidades en las notas? (Docentes)

Hay grupos de Secundaria que acaban de tener notas de preevaluación. Pero todos los centros antes de Semana Santa tendrán que dar resultados de Segundo trimestre / Segunda evaluación. Nuevamente nos encontraremos con la dificultad de poner notas a los niños y jóvenes de altas capacidades.


A mí me gusta poner la lupa en cada uno de ellos y huir de las generalidades, pero éstas nos sirven para comprender y explicar. Por esto, hoy, como recurso didáctico hablaremos de diferentes grupos entendiendo que no lo hacemos de personas porque ellos y ellas pueden pertenecer a diferentes grupos, a la vez o a lo largo de su historia, lo que hace este tema... mucho más distraído...


Grupo 1.- Alumnos de altas capacidades identificados con muy buen rendimiento. Trabajan bien, escuchan, participan, tienen el autocontrol requerido para no molestar ni a los otros, ni a él mismo. Sus producciones son excelentes. Cuando se salen de la norma es para mejorarla, y siempre con la previa autorización del docente. Los de este grupo son los superevidentes y normativos. Sus resultados son muy buenos pero requieren de algo más. Les hacen falta observaciones alentadoras.

Grupo 2.- Alumnos de altas capacidades con un rendimiento aceptable pero que no están motivados a mostrar más. Sus producciones son muy mejorables, a menudo libradas fuera de tiempos... Son aquellos que suelen leer en los comentarios de las notas que podrían tener mejores resultados si tuvieran más dedicación e implicación... pero no se ponen.


Grupo 3.- Alumnos de altas capacidades con resultados irregulares. Son aquellos que sólo trabajan en aquellas materias que les gustan o en las que conectan con el docente. Volvemos a comentarios sobre la carencia de dedicación e interés.


Grupo 4.- Alumnos de altas capacidades con rendimiento bajo o muy bajo. Son aquellos alumnos que a pesar de sus capacidades se van desenganchando del sistema escolar. No tienen la motivación, ni la constancia, ni el esfuerzo, de hacer "lo que toca y no és negociable". Algunos es por apatía y/o carencia de motivación. Otros puede ser por resistencia activa a un sistema que no les tiene en cuenta. Aquí los comentarios suelen ser: "que si no hay un cambio radical, no podrán superar el curso". En las notas suelen aparecer definiciones de los trabajos o comportamientos pero nada motivador.


Si estan identificados, todos ellos deberían tener un PI (plan individualizado), una adecuación metodológica y/o de contenidos. Unos la disfrutan y otras no pueden o no quieren disfrutarla. Si no hacen "lo que toca" por qué "debemos proponer nada más" (qué paciencia seguir oyendo estos comentarios referidos a alumnos de altas capacidades en el siglo XXI) y es que hay que proponer “en lugar de” no “después de”.


A los alumnos que disfrutan de las adecuaciones ¿cómo valorarles si algunos ya tenían muy buenos resultados antes? No puede entrar en la base numérica porque tal vez llegó ya al diez, y tendrá que entrar en la parte de los comentarios.


A los alumnos que disfrutan de las adecuaciones, ¿cómo valorarles cuando sus resultados de “la base” no son positivos? Hay que reflexionar. Si superan el piso superior quiere decir que el inferior está superado. ¿Lo verán reflejado en las notas numéricas? Seguramente hará falta también un apoyo o explicación en los comentarios.


A los alumnos que no entran en las adecuaciones, ¿cómo valorarles si no superan la supuesta base? Hay que parar y estudiar cada caso. Posiblemente no hemos conectado con él o con ella; y no será posible continuar trabajando con el alumno si no quiere por mucho que nos esforcemos. El alumno es el protagonista de su aprendizaje y tiene altas capacidades aunque estén un poco enmohecidas o no trabajadas. Es imprescindible una acción tutorial a fondo.


Si trabajáis con autoevaluaciones tenemos mucho de ganado. Para estos niños y jóvenes es un muy buen recurso junto con la metacognición. Podemos obtener información y a la vez consolidar el vínculo imprescindible porque este alumno sea capaz de desplegar sus capacidades.


A menudo no encontramos frases por estos alumnos y estas situaciones en el modelo que nos proponen los boletines de calificaciones informatizados. Quizás estamos a tiempo de introducir frases nuevas o no. También podemos añadirlas a mano. Pero siempre será necesario valorar el funcionamiento del alumno en el PI.


Sus calificaciones tienen que tener en cuenta los recursos de los que dispone y qué hace. No puede ser que en las calificaciones de los alumnos de altas capacidades no se haga ninguna referencia a las adecuaciones que se llevan a cabo para atender sus necesidades.


Hablamos mucho de atender la diversidad y en muchos casos hace, incluso al alta, pero no queda reflejado a las notas. Las notas deben ser el reflejo de lo que estamos haciendo en el aula y fuera de ella con un alumno concreto y de lo que hace él/ella. Lo conseguimos?



lunes, 22 de febrero de 2021

Hago todo lo que puedo pero nada parece ser suficiente (Sobretodo Padres pero también Docentes)

La maternidad-paternidad no es fácil. Decían que los niños venían con un pan bajo el brazo, pero nunca nadie ha dicho que vinieran con un manual de instrucciones. Todos los padres y madres lo hubiéramos agradecido tanto como un pequeño botón de on-off para momentos de emergencia. Pero si todos los padres lo hubiéramos agradecido, los padres de los niños y jóvenes de altas capacidades seguro que serían capaces de iniciar una recogida de firmas hoy mismo para conseguirlos, si fueran posibles.


Si sólo pudiéramos usar un adjetivo para definir estos niños y jóvenes, diríamos que todos son intensos. La intensidad tiñe su vida y les puede afectar de maneras muy diferentes, pero sin duda, la intensidad es una de las características más frecuentes. Pero hay otras muchas: curiosidad, rigidez, hipersensibilidad, poco autocontrol, necesidad de novedad y movimiento, fuerte sentido de la justicia, necesidad de la verdad, preocupación extrema por todo y todos, observación escaneadora, incontinencia verbal, memoria de elefante, disincronía entre la parte cognitiva y el emocional... y todo al extremo.


Cuando un vehículo va a toda velocidad se mucho más difícil de conducir porque en la conducción empiezan a aparecer otros elementos diferentes del coche, la pericia del conductor o la carretera. La propia velocidad juega un papel muy importante que hará que el goce del paisaje y el tiempo de frenada sean muy diferentes otros vehículos que se mueven a una velocidad más razonable.


Los niños de altas capacidades lo son desde siempre. Vienen así de serie; aunque los identificamos a los tres, a los seis, a los diez, a los quince o a los cuarenta años. Ya son. Y los padres lo saben aunque de inicio no liguen jefes. Y como que pueden ser muy diferentes es muy habitual que no sepamos qué pasa. Tenerlos que criar sin saber por qué son cómo son puede llegar a ser muy complejo. Hay hijos que parece que lo ponen fácil pero hay otros que no. Todo lo que haces por ellos, como padres, nunca es suficiente.


Este era el comentario casi desesperado de una madre. “No paro, me desvivo por ellos, siempre buscando cosas que les vayan bien, actividades motivadoras, alimentos saludables, compañías positivas. Y después de la satisfacción aparece la insatisfacción, parece que no son capaces de disfrutar y ser agradecidos todavía exigen más. Nada es suficiente. Cada cinco minutos novedad. Siempre quieren algo más”. Evidentemente no es el caso de todos, pero a quien le ha tocado no le consuela mucho, por no decir nada, que haya niños y jóvenes que parece que van solos.


Qué podemos hacer con aquel niño o joven que no se apasiona por nada? Todo lo que le proponemos le parece un rollo, sopla, protesta...hace pero sin que le brillen los ojos. Parece de jabón porque cuánto más lo quieres coger más se te escapa de las manos.


Qué podemos hacer con aquel que tiene "arranque de caballo y parada de burro"? Parece que se apasiona pero le dura dos días, puede ser que todo le vaya bien, le guste, pero nada le motiva bastante..


Qué podemos hacer con aquel niño que tiene un tema: los dinosaurios, el espacio, los animales extinguidos, los egipcios, los romanos, los caballeros medievales, los números, el Titannic, los volcanes... vive eintensamente lo que le interesa muchísimo, mientras el resto del mundo parece transparente y ni lo ve?


Y con aquella chica que necesita más vitaminas cognitivas pero que quiere pasar desapercibida porque no quiere que sus amigas la dejen de lado?


Y con aquel que quiere hacer sólo lo que él o ella quiere y no atiende a las cosas que tocan y no son negociables? Quiere que el mundo gire a su alrededor y lo consigue cuando la familia cede, con la condición de que el niño no se enfade y no haga pataletas, cuando ya no es tan pequeño.


Y con aquel que es capaz de leer sobre el espacio y los agujeros negros pero cuando hay un problema a clase y el profesor le dice que le pondrá siete negativos no lo sabe descodificar y se lo toma al pie de la letra y se rompe por dentro porque siente que ya tiene esta materia suspensa por siempre jamás y no le darán el título.


Y aquel que no para de moverse, que no para quieto en la silla, que se le cae todo, que necesita tener las manos ocupadas y todo el mundo piensa que es un TDA pero lo único  que necesita es que le den un rato para moverse y un motivo para estar quieto?


Y aquel que después de 8 años deciden que ahora ya no es Asperger y sus dificultades de relación quizás eran debidas a la timidez, a la dificultad de gestionar la frustración, a la rigidez de su comportamiento, la intensidad de las altas capacidades y ahora ha conseguido una relación “normalizada”, con quién él quiere y siempre desde la discreción.


O aquel que responde de manera agresiva, prepotente; o de manera sumisa y con inferioridad; porque está harto de esperar y no entiende por qué siempre es el extraño, el “rarito” y por qué sus compañeros no le aceptan como es?.


Podría proponeros mil casos reales de chicos y chicas, de padres desesperados porque estos niños y jóvenes no responden a la imposición, responden únicamente a la seducción, a la fuerza de la razón, de la justificación de la palabra que tienen que entender y ver como positiva para ellos para empezar un cambio de comportamiento.


A la pregunta qué podemos hacer mi respuesta es estar a su lado. Quererles  siempre. Escucharles siempre. Intentar, partiendo de validar sus sentimientos y emociones, que puedan poner palabras a sus dificultades, a aquello que les angustia sea presente o futuro. Una vez tenemos definido el problema podemos pensar mil soluciones. Ellos sólo deben usar la suya, la que les encaje, aunque para encontrarla necesiten diferentes intentos. Como padres, a veces nos sentimos solo, se nos acaban las ideas... en estos momentos es importante contar con un interlocutor válido, o con una red de personas que saben de qué hablamos y que estamos viviendo.


Eso sí, cuando empieza el cambio, que suele empezar con un primer paso, es fantástico. No hay recetas, ni varitas mágicas pero cuando conectamos con ellos y se ponen en marcha... es fantástico!



jueves, 18 de febrero de 2021

Intervención educativa extraordinària: compactación de cursos (Padres y Docentes)

Cuando hablamos de las intervenciones educativas que se pueden proponer a los alumnos de altas capacidades las hay de dos tipos: las ordinarias y una de extraordinaria. Hoy hablaremos de esta última.


Me gusta más hablar de compactación de cursos que de aceleración. Creo que de este modo queda claro que no saltamos, que no corremos, que no dejamos agujeros, compactamos (hacemos dos cursos en un año escolar) sin dejar espacios vacíos en unos cimientos que tienen que ser fuertes para construir el buen edificio del conocimiento.


No todos los niños y jóvenes de altas capacidades van a hacer compactación de cursos. Nosotros creemos que hay que poner la lupa sobre cada uno de los niños y jóvenes para saber qué es el que necesitan en cada momento.


Los recursos extraordinarios se aplican cuando los ordinarias ya no hacen el efecto esperado, cuando las actividades ordinarias no son suficientes para atender sus necesidades.


Hay familias que se asustan y no quieren oir hablar de cambiar de curso. Por el contrario las familias que han usado esta medida, en un tanto por ciento altísimo están contentas de lo que ha supuesto para su hijo o por su hija.


Nuestra legislación permite hacer una aceleración en Primaria y una en Secundaria. En algunos casos excepcionales hasta se puede pedir una tercera aceleración.


Las compactaciones pueden venir solicitadas por la escuela o por la familia. Hay que justificar esta aceleración a la administración educativa correspondiente, en nuestro caso al Departamento de Enseñanza de la Generalitat de Catalunya. Los niños y jóvenes de altas capacidades ya están registrados como alumnos de necesidades educativas específicas en la Inspección educativa porque los centros pasan la información en los datos de centro que presenta cada inicio de curso. Generalmente estos alumnos tienen un Plan Individualizado, que es la compilación de propuestas que se llevarán a cabo en el centro para atender sus características especiales. El EAP ya los conoce y son los que tendrán que confirmar esta intervención educativa extraordinaria.


Los mejores cursos para hacer una compactación de cursos en nuestro sistema educativo son de Cuarto de Primaria a Sexto, y de Primero a Tercero de ESO. Pero esta es la teoría... porque cuando ponemos la lupa vemos que hay niños que la necesitan antes, o que cuando la identificación de características es tardía no llegamos a tiempo, o por diferentes causas lo tenemos que hacer en otro momento. A mi, me gusta no perder la posibilidad de cerrar e iniciar etapas.


Qué necesitamos para poder proponer una aceleración para nuestro hijo o nuestro alumno?


1.- Identificación de altas capacidades partiendo de pruebas objetivas de inteligencia, creatividad y personalidad. No es tanto un CI superior a 130 (valoración obsoleta si se toma como el único indicador importante). Puede ser un CI superior a 125 con características propias de las altas capacidades que pueden tener forma de superdotación, o de talento simple, o compuesto.


2.- Aspecto académico. Si tiene un buen rendimiento de trabajo y unos buenos hábitos de trabajo tiene más posibilidades de poderlo aprovechar bien. Pero algunos alumnos no tienen buenos resultados por la carencia de motivación y de trabajo continuado pero si trabajaran los podrían tener (este grupo de alumnos hacen dudar a algunos docentes). Si pertenece a este segundo grupo será necesario acompañarlos para conseguir este buen ritmo de trabajo.


3.- Aspecto social. Hay alumnos muy arraigados a su grupo-clase pero otros teniendo una buena relación con la clase refieren que es muy superficial. Están bien pero podrían estar bien también en otros grupos. Quizás en el grupo superior ya conoce alumnos con los que tiene buena relación.


4.- Aspecto madurativo. Quizás el cambio en la parte académica y en la social está clara pero tiene que estar fuerte emocionalmente porque pasará una temporada que no será de en ninguna parte. De un grupo porque ya ha salido y en el otro acaba de llegar. Cuando estan los maestros delante todos mantienen las formas pero en los cambios de clase, a los pasillos, en las entradas y salidas puede oir “qué hace este pequeño en nuestra clase” o se puede quedar solo en un trabajo por parejas los primeros días... después cuando descubran su potencial puede ser que lo quieran solo para trabajar o que esperen su error por risa o hacer comentarios inadecuados. Tienen que estar preparados para no hacer aprecio de los comentarios malintencionados o las miradas que los acompañan, si los hay.


5.- Si todas las características anteriores son positivas, y el centro y los padres tienen claro que puede ser la mejor opción para este alumno concreto, llega el momento de hacer una primera consulta al Departament d'Ensenyament de la Generalitat de Catalunya, porque no deberíamos plantear posibilidades al alumno que no podamos cumplir. Es una consulta, porque ellos la podrían frenar si no está muy justificada. Más adelante ya haremos el proceso de la información con toda la justificación.


6.- Si todas las características anteriores son positivas, y el centro y los padres tienen claro que puede ser la mejor opción para este alumno concreto, llega el momento de hacerle a propuesta directamente. La mayoría no saben de esta posibilidad y lo primero que te preguntan es si esto es legal (y es que suelen ser muy normativos). Si estamos hablando con un niño de Tercero-Quart de Primaria ya es capaz de saber que quiere decir aburrirse en la escuela, esperar que todo el grupo haya acabado... es consciente de lo que significa un curso menos de escuela y empieza a saber a que va a dedicar este curso que gana... Pero enseguida aparecen las dudas del cambio, que siempre son sociales, nunca estrictamente académicas. Se refieren a los amigos que dejará, los que hará, que tendrá un tiempo de aclimatación... seguro que va a necesitar un tiempo para pensarlo. No podremos hacer nada sin su consentimiento por lo tanto sabemos que debemos darle la explicación completa, con pros y contras, responder todas sus preguntas y darle un tiempo para que pueda tomar una decisión. 


7.- Una vez el alumno ha decidido positivamente, es el momento de presentar la documentación a la administración educativa.  Si está muy justificada ya podemos empezar a poner manos a la obra y empezar el proceso de compactación de cursos.


Cuando propongo una compactación de cursos me gusta proponerla en el tercer trimestre del curso anterior para que se pueda preparar la temporalización y el que tiene que hacer todo el mundo y en qué momento. Me gusta que el alumno haga el primer trimestre en el curso que le corresponde. Al final del primer trimestre con una nueva evaluación de las áreas, se puede empezar una aceleración parcial de algunas áreas (suelen ser las matemáticas y el inglés, y quizás otros de una hora para igualar los horarios). En el segundo trimestre está entre dos cursos y se mueve entre dos cursos, de una clase a otra y tiene un horario propio. Ahora con la pandemia, los alumnos no pueden estar en dos grupos burbuja a la vez. Ahora, generalmente, nos solemos saltar este paso. Es una pena, era muy interesante porque permitía ir entrando poco a poco en el nuevo curso. En el tercer trimestre ya pasa al curso superior que se convertirá en su grupo. (la parte cognitiva requiere también un acompañamiento y a veces algunas explicaciones puntuales de conocimientos o procedimientos que no ha recibido pero esto lo comentaremos en otro post).


Algunos piensan que esta es la gran solución. De hecho es la más barata, el nuevo curso ya funcionaba. Al inicio hay que observar y acompañar su entrada en el nuevo curso. Pero una vez situado, no es el final... en uno o dos trimestres volverá a tener el tema cognitivo bien enlazado y necesitará de nuevo un plan individualizado. Nuevamente ampliación, profundización, la posibilidad de hacer pequeños grupos, trabajar la metacognición, ... 


Si queréis más información podéis leer el Informe Templeton que nos habla de la bondad de esta intervención educativa en las altas capacidades.


Cómo os decía al principio del texto no es una opción para todos los alumnos de altas capacidades, ni en cualquier momento. De los alumnos que yo llevo anualmente propongo entre tres y cinco compactaciones. Las que son imprescindibles y siempre poniendo la lupa en ellos y ellas.



lunes, 15 de febrero de 2021

El instinto humano del aprendizaje (Padres y Docentes ) Reflexión

Hoy partiremos de una conferencia del Dr. David Bueno, biólogo y catedrático en Neurociencia de la Universidad de Barcelona. Es fantástico cuando la ciencia ilumina lo que llevamos haciendo desde hace años, da una explicación lo que vemos cada día en nuestros niños y jóvenes de altas capacidades, sin hablar de ellos específicamente. Muchas veces le he propuesto hacer investigación en nuestro campo pero él siempre me dice que todavía quedan muchas cosas básicas para conocer del cerebro. Nosotros también necesitamos evidencias científicas.


El Dr.Bueno afirma que, para la especie humana, aprender es un instinto. No podemos no aprender y esto tiene relación con lo que nos explican muchos niños y jóvenes de altas capacidades. Nos dicen "realmente no hago ningún esfuerzo para aprender. Es cómo si las cosas se me acercaran y se quedaran impresas en mi memoria pero se relacionan con otros conceptos en red; no para repetirlos como los he aprendido, sino para aplicarlos en otros lugares diferentes.


Durante muchos miles de años los seres humanos han aprendido de su entorno más próximo primero porque no tenían datos para aprender del mundo lejano y segundo, como el aprendizaje siempre tenía que derivar en una práctica (eficacia, que sirva) no tenía demasiado sentido aprender de un lugar donde nunca vamos a ir o de materiales que nunca usaré. Aprendemos principalmente por utilidad, lo que nos puede ser útil en un futuro próximo. (pero yo añadiría que también aprendemos por el placer de aprender).


Hoy nuestro entorno ha crecido. Ya no es la cueva, el poblado o la ciudad, ni siquiera el país o el continente... nuestro entorno ya es el mundo. A través del ordenador y sus redes podemos ver este entorno global que forma parte de nuestro mundo en detalles concretos.


Pero, por qué tenemos que aprender? Qué nos aporta el aprendizaje que lo ha convertido en un instinto? Dado que la vida es muy rica y no lo podemos prever todo, el autor nos dice que aprendemos para anticipar las incertidumbres del futuro. Estas incertidumbres pueden ser de dos tipos: pueden ser amenazas de las que nos hemos de proteger, pero también pueden ser oportunidades a las que debemos saber identificar y las tenemos que saber aprovechar.


Nuestros niños y jóvenes de altas capacidades disfrutan aprendiendo. Es una de las características más frecuentes de los alumnos de altas capacidades. Su curiosidad puede ser más o menos explícita, más o menos específica o generalística, pero forma parte de la gasolina que los mueve.


Ahora sabemos que todo lo que aprendemos da forma a nuestro cerebro, crea conexiones. Esto me hace pensar que es muy posible que el cerebro de nuestros niños y jóvenes sea diferente, más eficiente.


Este hecho tan cognitivo hay que conectar-lo lo con la inteligencia emocional. La respuesta a la incertidumbre puede ser a miedo o la curiosidad. En nuestros niños cualquiera de las dos estará impregnada de una gran intensidad. No tienen minúsculas solo mayúsculas. Si ante la incertidumbre solemos reaccionar con miedo podemos ser personas poco transformadoras; poco proactivas, más bien reactivos con buenas dosis de impulsividad y un bajo control de las emociones. Pero si ante la incertidumbre solemos reaccionar con curiosidad nos mostramos más proactivos  y nos ayuda a observar, escuchar, pensar, a actuar y a ser.


Aprender es tener novedades (si no son novedades no hay aprendizaje). Y aquí se abre una de las grandes afirmaciones de nuestros niños y jóvenes que ven que en mucho tiempo dentro de la escuela su aprendizaje es menor que el que podrían obtener por su cuenta; pero esto será motivo de otro post.


El proceso de preguntar y responder les permiten acercarse a la realidad, mejorarse ellos y su entorno. Estas preguntas y respuestas se asocian con emociones como la alegría, la confianza, la calma, la satisfacción, el optimismo... Todas ellas nos hacen aprender de aquellos en quienes confiamos. Y nos llevan a pensar que sabremos detectar las oportunidades y podremos prepararnos para maravillarnos y sorprendernos con lo que nos aportarán y por lo tanto estar motivados.


Parece una explicación muy naïf de lo que es el aprendizaje pero me ha gustado y he pensado que podríamos reflexionar y ayudar a que esta alegría, confianza, calma, satisfacción, optimismo y motivación se conviertan en habituales en el día a día de nuestros hijos y alumnos.



jueves, 11 de febrero de 2021

El kit de los comportamientos sociales (Padres y Docentes)

Como siempre, tenemos que empezar por recordar la gran diversidad que encontramos en el ámbito de las altas capacidades. Hay muchas maneras de mostrarlas y por tanto puede ser que alguna de las cosas que explicaremos encajen como un guante con vuestro hijo o alumno, o no coincidan en nada.


A menudo decimos que tienen una gran capacidad para aprender, pero no llegan con el kit de los conocimientos puesto. Una vez preguntaban a un niño de cinco años: “tú que tienes altas capacidades, cuántas teclas tiene un piano?”. Cómo si por el sol hecho de tener altas capacidades hubiera nacido con Google insertado en su mente con todas las respuestas del mundo.


Pero del mismo modo que no tienen el kit de conocimientos tampoco tienen el kit de las convenciones sociales y esto les puede representar una dificultad en algunos casos.


Hay algunos niños y jóvenes que tratan a todo el mundo con una gran familiaridad y los cuesta discernir el nivel de confianza. Características como la hipersensibilidad, la rigidez, la necesidad de verdad y justicia, la intensidad, la velocidad... no ayudan mucho. Cuando son pequeños hacen mucha gracia pero cuando van creciendo, muchas veces, son mal interpretados porque su manera de relacionarse no es la habitual.


Hay veces que van tan deprisa que primero hacen y después piensan. Y muchas veces que no les da tiempo de pensar porque en su imaginario no hay lo que se ve desde el exterior, sólo hay lo que han hecho o visto siempre. Pongamos un ejemplo. Cuando están en la guardería es normal que los niños se abracen. A medida que van creciendo, los abrazos van quedando relegados para ocasiones especiales: reencuentros o despedidas de larga duración, momentos de cierta emotividad, momentos de mucha familiaridad... Muchos niños ven que la cosa cambia, que no está bien visto y frenan el número de abrazos, pero los hay que necesitan el contacto y la efusividad y no ven que este comportamiento lo están teniendo sólo ellos. Tampoco detectan que hay personas, otros niños, que no se sienten bien con sus abrazos. Y así van creciendo, ajenos al que pasa a su alrededor y a qué reacción tienen sus abrazos. Y sin darnos cuenta llegamos a la ESO, y quizás hacemos un cambio de escuela y llegamos a una escuela o instituto donde no nos conocen y comportamientos que antes se leían en clave de “ya lo conocemos, es su manera de relacionarse” ahora se leen en clave de “qué carencia de autocontrol” en el mejor de los casos.


Y sí, es urgente poner manos a la obra y hablar claro con ellos. Al inicio nos miran con ojos incrédulos cuando les hacemos notar que los otros no lo hacen. Su respuesta fue, “ahora que lo dices... es verdad... no se abrazan entre ellos y nunca nadie me abraza, siempre soy yo”. Cómo en tantas cosas, pasan tan deprisa que no se dan cuenta.


Dibujamos una diana. Él en el centro; en el segundo círculo las personas más próximas (la familia nuclear); en el tercero las personas de más confianza y en el cuarto el conjunto de conocidos y saludados (que incluye los compañeros). ¿Con qué personas podemos continuar usando los abrazos? Sólo con las personas del segundo círculo y a lo sumo las del tercero. Tendríamos que evitarlas con las personas del cuarto círculo excepto en las situaciones antes mencionadas.


Su cara era un poema. “¿De verdad? ¿Pero por qué? !A mí me gusta hacer abrazos! A veces es solo para jugar, algunas voy de cara y las ven venir, pero otras veces llego por la espalda y a veces se asustan...” Desconozco la razón pero no descodifica las sensaciones de los otros, y si no lo hacen solos les tenemos que ayudar. Lo tenemos que poner en su conocimiento porque no está.


El hecho de que lo conozcan, de que sean conscientes ya es mucho. No es fácil cambiar lo que has hecho siempre sin pensar. Ahora hay que pensar antes de hacer y evitar los abrazos. Empezamos por aquí. Creo que puede ir bien para mejorar su autocontrol. Implicaremos a toda la familia para hacer el seguimiento y compensar los abrazos que le falten durante el día recordando esta parte más cognitiva.


Quieren tener una buena imagen, algunos, pero no saben cómo. Pongamos palabras, seguimiento, refuerzo positivo para que pueda repetir las acciones correctas...


Iremos hablando de cómo va, e iremos añadiendo otros comportamientos haciéndolos visibles y colaborando para que encuentre el autocontrol necesario para vivir en sociedad. Estamos a su lado. El acompañamiento del niño o joven, a su familia y a los docentes es imprescindible. Es una carrera de fondo, no de velocidad, pero vamos avanzando... él o ella va avanzando en el proceso de ser la mejor versión de él mismo o ella misma.




miércoles, 10 de febrero de 2021

Tratamiento del error (Padres y Profesores)

Una de las dificultades más importantes que encontramos en los alumnos de altas capacidades es la baja tolerancia a la frustración. Hoy hablaremos de cómo viven el error y algunas herramientas para trabajar el encaje del error en el aprendizaje y en la vida.


Desde muy pequeños han aprendido con facilidad. A menudo, de manera precoz y sin ningún esfuerzo. Era cómo si los aprendizajes fueran hacia ellos. La curiosidad allanaba el camino, la memoria consolidaba y establecía relaciones construyendo una red de conocimientos y procedimientos muy sólida. Esto ha provocado, durante mucho de tiempo, una sensación muy positiva en la respuesta de los referentes adultos frente los aprendizajes mostrados por el niño.


Ante un reto, un aprendizaje nuevo o una dificultad, a menudo, los niños o jóvenes se plantean qué tendrían que hacer o cuál es el resultado esperado. La presión no suele venir de fuera sino que la provocan ellos mismos. A partir de aquí hay diferentes maneras de de abordar el resultado obtenido. Ante una nueva propuesta con un nivel de dificultad superior...


- Para algunos su primera respuesta es NO. “No lo sé”, “no puedo”... no lo intentan. La posibilidad de cometer un error, de mostrarse vulnerables ante los otros, de que los otros rían de él o ella los paraliza. Prefieren no intentarlo. Ponen el freno de mano.


- Otros lo prueban una vez: si sale bien ningún problema, pero si no sale como esperan... pueden intentarlo una o dos veces, pero si el error persiste lo dejarán, o no harán ni el segundo intento.


- Un tercer grupo se crece ante el reto. No permite que la dificultad lo paralice y lucha a través de la repetición o poniendo en marcha sus recursos para conseguir el objetivo. Su amor propio se transforma en energía y busca la salida correcta.


- Hay quienes se dan un tiempo para reunir fuerzas y volverlo a intentar al cabo de un tiempo y podran pasar a cualquiera de los tres grupos anteriores.


No tendríamos que permitir que se bloqueen. A veces, su hipersensibilidad les juega en contra. Les tenemos que acompañar, y hacer que poco a poco se vayan enfrentando con la dificultad y el error sin quedar paralizados.


Me gusta explicarles que el error forma parte del aprendizaje. No lo buscamos pero le encontramos por el camino. Cuando lo encontramos no debemos empequeñecernos sino que tenemos que aprender de él y seguir adelante. Algunas veces, echar un poco atrás para coger fuerzas y seguir adelante; otras para confirmar un nuevo camino. Tenemos que aprender a leer los errores porque nos dan mucha información si los sabemos leer. Su cerebro nos entiende pero a veces su cuerpo todavía no está preparado. Hace falta tiempo para que el cerebro y el cuerpo se pongan de acuerdo y trabajen en la misma dirección. Pero es buena madera para quemar en este cerebro que no para de pensar y que va haciendo suyos los nuevos conceptos e ideas.


Es muy interesante como encajamos los errores sus adultos de referencia. Ellos nos observan siempre. Piensan sobre lo que ven. Van tomando sus decisiones, van conociendo cómo son y elaboran cómo quieren ser.


Les va muy bien cuando dejamos ideas sobre la mesa para que ellos las pueden hacer suyas. Un buen regalo es un lápiz con una goma incorporada o una gran goma que borre muy bien. Los errores a menudo son inevitables pero podemos subsanarlos y seguir adelante.


Los alumnos de altas capacidades necesitan retos. No es fácil medir la dificultad de un reto. Si es demasiado sencillo no será motivador pero si la propuesta es demasiado difícil quizás lo evitará. Podemos proponer actividades sin techo en las cuales son los alumnos quien por su propio interés intentan hacerlas tan bien como les sea posible.


Algunos maestros o profesores se quejan de que algunos alumnos de altas capacidades no se apuntan a trabajos de ampliación propuestos en abierto en el aula. Trabajos que tienen una dificultad superior. D., de Tercero de Primaria, tiene una respuesta muy clara: “si hago lo que hace todo el mundo tengo muy buenos resultados pero si hago cosas más complejas ya no tengo asegurados estos excelentes resultados”.


Sabemos que no trabajan por imposición, que lo hacen por seducción, por pasión, por voluntad propia. Por lo tanto, les tenemos que convencer de que es importante de que cojan esta opción. Podemos apelar a su lógica y a su sentido de la verdad y la justicia. Del mismo modo que los niños que tienen dificultades de aprendizaje no copian los enunciados, aquellos que pueden hacer actividades más elaboradas están moralmente obligados a hacerlas. Quizás les costará arrancar pero disfrutarán haciendo estas nuevas actividades. Si no conseguimos que se enganchen tendremos que continuar trabajando con ellos hasta que lo entiendan y lo hagan... a veces es un proceso largo. Hasta que no cierren el paraguas y se saquen el chubasquero no se mojarán, y ésto depende claramente de ellos.


Juanjo Fernandez es educador y comunicador. Hace muchos años que nos seguimos mutuamente. Le admiro porque sabe elegir las ideas y expresarlas con dibujos y éste es perfecto para el tema de hoy.



lunes, 1 de febrero de 2021

Mañana la Candelaria. Motivación y Proyectos (Docentes i Padres)

Mañana es el día de sacar y guardar el belén. Algunos quizás habéis abierto unos ojos como platos porque ya hace mucho de tiempo que guardasteis todas las decoraciones de Navidad y también el belén. Las fiestas de Navidad que empezaron con la Inmaculada, el 8 de diciembre, se acaban con la Candelera, el 2 de febrero. Dice la tradición que el belén se pone por Santa Lucía, el 13 de diciembre, y se saca por la Candelera, el dos de febrero. Hay gente que sigue las tradiciones por costumbre o con la ilusión de seguir lo que aprendió en casa... tener el pesebre puesto, aunque muchos lo hayan sacado tiene un sentido para él o ella. Guardarlo mañana, tiene un sentido.

Decimos que cuando algo tiene sentido para nosotros, estamos motivados a hacerlo. La motivación puede venir desde fuera (por tradición, por imposición...) o desde dentro (porque le encuentro un sentido). Cuando en el mundo educativo conectamos con esta segunda motivación es cuando las cosas funcionan bien de verdad.

En la atención a la diversidad al alta uno de los retos es conectar con esta motivación del sentido. Hay maestros que encuentran este punto. Aquí tenéis una propuesta que ha puesto en marcha una maestra de Cuarto de Primaria de la Escuela La Viña de Camp Joliu de l'Arboç.

En la clase tiene dos niñas muy potentes no identificadas pero que pueden ser de altas capacidades y dos más identificadas una con superdotación y otra con un talento lingüístico muy potente. Les ha propuesto un Proyecto individual. Lo realizan en casa y cada miércoles a las 11h. se encuentran un rato para hacer el seguimiento del Proyecto. Por la edad de las alumnas, la maestra ha establecido un trabajo muy pautado que permite un alto grado de creatividad. Ellas han elegido cada una un tema: la Magia, las Fosas de las Marianas, la fauna de la comarca del Garraf y Julio Verne. Ha hecho falta temporalizar el trabajo. Desde el inicio, a la vuelta de las vacaciones de Navidad tienen marcadas las fechas en las que tendrán que presentar las tareas propuestas y así se pueden organizar. Cada cual las hará partiendo del tema que ha elegido.

Veamos algunas propuestas:

- Matemáticas: 5 problemas que se resuelvan con las operaciones que hemos trabajado en clase con la temática del Proyecto.

- Catalán: Escribir un cuento que tendrán que explicar a un pequeño grupo de Primero de Primaria.

- Castellano: Hacer una revista de curiosidades sobre su tema.

- Inglés: Buscar una canción sobre el tema y traducirla.

- Medio natural: preparar un Power Point sobre algún tema sobre la naturaleza relacionado con su tema para exponerlo en clase.

Cómo veis, son actividades abiertas y sin techo. La primera actividad y la segunda ya las han presentado. Los problemas son muy originales. Los cuentos son fantásticos en la forma y el fondo. En todos ellos encontramos la portada, el texto y las ilustraciones, el índice, e incluso una contraportada con un breve resumen para animar a la lectura... Para la revista, la maestra les ha dado una cartulina para que les sirva de portada y contraportada...  seguro que escribirán revistas muy interesantes!

La maestra nos dice que están entusiasmadas y que cuando acaban las tareas de clase van preparado, pensando, haciendo esbozos o acabando los trabajos que tienen que entregar del Proyecto. Esta es una propuesta de una maestra concreta con la idea de responder a las necesidades de sus alumnas.

Estos trabajos no tienen techo, queremos decir que no hay una respuesta concreta que sea positiva, hay muchas posibles; y además que no se tienen que parar en un lugar concreto, las alumnas pueden volar tan alto como quieran, o pueden ir en la dirección que deseen.

¿Lo veis muy difícil de hacer? ¿Cómo creéis que lo reciben los alumnos? La maestra quiere que lo expliquen en la clase porque quizás en el próximo trimestre puede ser que otras alumnas se apunten a hacer este trabajo extra. La motivación para hacer el Proyecto proviene de dentro.

¿Os queréis apuntar a proponer un Proyecto de este tipo? Pensáoslo, y si queréis que hablemos... estamos a vuestra disposición, podéis encontrarnos en atencioaltescapacitats@gmail.com