lunes, 31 de enero de 2022

Pasado mañana, la Candelaria. Hablamos de motivación (Padres y docentes)

Este miércoles es el día de sacar el belén y guardarlo hasta el año que viene. Algunos quizás habéis abierto unos ojos como platos porque ya hace mucho tiempo que guardasteis todos los adornos de Navidad y también el belén. Las fiestas de Navidad que empezaron con la Inmaculada, el 8 de diciembre, se acaban con la Candelera, el 2 de febrero. Dice la tradición que el pesebre se pone el día de Santa Lucía, el 13 de diciembre, y se saca el día de la Virgen de la Candelaria, el dos de febrero. Hay gente que sigue las tradiciones por costumbre o con la ilusión de seguir lo que aprendió en casa... tener el pesebre puesto, aunque muchos lo hayan sacado tiene un sentido para él o ella. Sacarlo el miércoles, tiene un sentido, aunque otros no lo hagan.


Decimos que cuando algo tiene sentido para nosotros estamos motivados a hacerlo. La motivación puede venir desde fuera (por tradición, por imposición...) o desde dentro (porque le encuentro un sentido) y no siempre depende de lo que hagan los demás. Cuando en el mundo educativo conectamos con esta motivación interior es cuando las cosas funcionan bien de verdad.

En la atención a la diversidad al alta uno de los retos es conectar con esta motivación del sentido. Hay maestros que encuentran este punto. Una vez han conectado con los alumnos les pueden  ofrecer actividades muy abiertas o muy concretas, sin techo, con una aplicación clara (aunque sea hacer de base para otros conocimientos...)...


Hoy reflexionaremos sobre dos tipos de alumnos que no se dejan motivar o a los que nos cuesta mucho motivar:

- Algunos no saben que pueden ir más allá. Son políticamente correctos y hacen el que se les sugiere, pero por el motivo que sea han perdido la iniciativa en la escuela porque han visto que lo que realmente funciona es hacer lo que toca. Y están enrocados en esta posición sin saberlo.

- Otros están apagados. Los hay que a pesar de una identificación oficial, no creen que ellos puedan. Su autoconcepto les arrastra hacia abajo con una piedras en los bolsillos en forma de hechos reales magnificados que guardan en su memoria como hechos inamovibles.


En estos dos casos hay que trabajar mucho el vínculo. La relación personal con ellos es la que les permitirá desencallar estos pensamientos imposibilitantes. “No puedo”, “no sé”, “no lo ha dicho”, “no lo haré bien”, “¿le gustará?”… Cuando empieza el cambio y mejoran los resultados puede ser espectacular: solo hace falta que ellos se lo crean, que pongan en marcha sus capacidades y tengan la constancia de hacer el trabajo tan bien hecho como les sea posible.

Ojalá les podamos coger a tiempo y no los perdamos, porque suelen esconderse y no son nada evidentes. Por eso, y por muchas cosas más, insistimos en la necesidad de hacer formación y sensibilización entre los maestros para que puedan leer entre líneas, y en la necesidad de hacer predetecciones en las clases para descubrir, no solo aquellos niños brillantes sino también los que pueden llegar a serlo. (de las predetecciones hablaremos en un próximo post).


La imagen de hoy es para una obra de la pesebrista Montserrat Ribas que hace unas figuras muy originales en las que pone en valor la figura de San José, siempre en segundo plano.



jueves, 27 de enero de 2022

¿Preparamos el Carnaval? (Docentes)

 

En la escuela vivimos el presente y preparamos el futuro. Quizás estos días estamos haciendo actividades para celebrar el DENIP (Día Escolar sobre la No Violencia y la Paz). Pero os propongo que empecéis a pensar en la participación de los alumnos de altas capacidades en el Carnaval de la escuela o del instituto.

Antes de iniciar el tema del Carnaval, volvemos a manifestar la gran diversidad existente entre los niños y jóvenes que presentan altas capacidades. Yo he encontrado casi de todo. Desde quién sería feliz siendo el Rey de la fiesta leyendo el Pregón, muy disfrazado, poniéndose cada día los objetos más inverosímiles; hasta aquellos que empiezan a somatizar cuando llega el mes de febrero porque no pueden soportar la vergüenza propia y ajena de estas fiesta de Carnaval. Unos viven la emoción en positivo y puede ser desbordada, y para otros también se desborda pero en negativo y “mueren” aplastados por ella. También hay quién lo vive como una etapa más y hace lo que toca, lo que se le pide, intentando pasar desapercibido. Algunos de ellos sufren por su hipersensibilidad a los ruidos (batucadas), a la música a gran volumen (a los desfiles), a las aglomeraciones de gente...

Nuevamente hay que poner la lupa en cada niño o joven y definir qué necesita. Algunos han trabajado el tema y nos lo pueden explicar bien, pero otros pueden dar una respuesta como  “No quiero participar” o el temido “¿Es obligatorio?” que traducimos por “No me preguntes”, pero que en el fondo quiere decir “Este tema lo tenemos que trabajar”.

Vivir las fiestas es esencial. Pero lo más importante es encontrar cuál puede ser su papel en la fiesta (como siempre, nos sirve para todos los niños pero aquí hablamos de los niños y jóvenes con altas capacidades). Todo el mundo debería poder participar, según su manera de ser y hacer. Evidentemente todo es más fácil cuando encasquetamos un disfraz a todos los alumnos del grupo y esperamos que todos hagan lo mismo (disfruten, hagan una danza o un desfile), pero esto no es real ni satisfactorio para todo el mundo.

¿Podemos proponer diferentes maneras de vivir la fiesta? Las fiestas se tienen que preparar, vivir y guardar. Si tenemos una visión abierta podemos proponer mil cosas según las edades... aquí tenéis algunas ideas:

- Ayudar al diseño y confección de los disfraces o complementos.

- Ayudar al diseño y preparación del maquillaje.

- Ayudar a elegir la música o a preparar la coreografía.

- Ayudar con el equipo de música.

- Ayudar en tareas administrativas.

- Ayudar en la organización.

- Estar de jefe de grupo en los desfiles.

- Preparar textos o carteles para animar a la participación.

- Hacer un anuncio para la radio local para animar a la participación.

- Escribir el Pregón en grupo pero no leerlo.

- Leer el Pregón pero no escribirlo.

- Hacer fotografías para documentar el acto.

- Vivir la fiesta como “periodista” para redactar la noticia para el blog de la clase o para la web de la escuela.

- Vivir la fiesta para explicar la noticia por radio local.

- Vivir la fiesta para crear un video de YouTube.

- Vivir la fiesta y hacer entrevistas para mostrar la experiencia de la fiesta.

- Recoger datos reales para después poder preparar problemas de matemáticas sobre el Carnaval.

Cómo habéis visto hay muchas posibilidades pero las tenemos que activar. Algunos docentes piensan que solo hay blanco o negro: o te disfrazas o no participas, pero como siempre en la vida hay una extensa gama de grises. Quizás de entrada ante la oferta de actividad pueden quedar sorprendidos y no saber escoger qué pueden hacer, algunos hasta evitan elegir pero por eso necesitamos empezar a hablar de ello con tiempo. Muchos necesitan, como en la cocina, guisar a fuego lento, hacer “chup, chup” e ir removiendo, para encontrar cuál puede ser su lugar, en el que podrían disfrutar de la fiesta. Todos deberían poder disfrutar de la fiesta y tener un buen recuerdo. Es una fiesta anual que permite explorar diferentes recursos a lo largo del tiempo.

Para mí, “la fiesta” forma parte del “toca no negociable” pero la manera de participar es uno de los “toca más negociables”. Algunos llegarán a somatizar y se pondrán enfermos cada Carnaval. (Conocí un chico de Sexto que no había podido celebrar ninguno de sus cumpleaños con los compañeros porque, año tras año, cuando llegaba la fecha tan esperada se ponía enfermo.)

La parte académica es importante pero vivir las fiestas forma parte del bagaje emocional de cada uno de nosotros. Nuestras vidas están llenas de trabajo con algunos momentos de fiesta. A menudo preparamos estos niños y jóvenes para el trabajo y tenemos la falsa creencia de que a la fiesta se apuntan todos, pero la realidad no siempre es ésta.

Acompañar a los niños y jóvenes para que tengan una vivencia positiva de la fiesta es esencial para un crecimiento armónico. Por eso, si hemos elaborado un buen vínculo con ellos, una vez haya terminado el Día de la Paz, podemos empezar a hablar en las tutorías individualizadas de la Fiesta del Carnaval.

Si os atrevéis, me gustaría que me explicarais cómo ha ido la experiencia y qué dejaréis anotado para el próximo curso. No hace falta que cada año empezamos desde cero. Cuatro líneas, no hay que escribir un libro (que quizás podríamos, pero no es el caso). Lo podéis hacer a atencioaltescapacitats@gmail.com  Os lo agradezco. Nos puede servir a todos y todas los que trabajamos para estos niños y jóvenes sean la mejor versión de ellas y ellos mismos tanto en el trabajo como en la fiesta.



lunes, 24 de enero de 2022

Formamos parte de tu equipo (padres y docentes)


A menudo, con los niños y jóvenes de altas capacidades volvemos a la casilla de salida. Cada curso cambian de profesores, tutor/a... cuando no cambian de ciclo, de etapa o directamente de escuela. No siempre hay continuidad, un buen traspaso de información... porque si no es evidente y de libro... con excelencia académica parece que no tengan altas capacidades y no se cree necesario realizar ninguna intervención educativa. En los casos en los que existe una identificación es difícil, pero sin identificación la intervención puede ser casi imposible. Muchos docentes se escudan en los mitos. Esperan a niños y niñas eficientes, con conocimientos extraordinarios, como viejos en cuerpos de niños... pero ellos son, y son como son. Y tienen el derecho (y la obligación moral) de ser la mejor versión de sí mismos y de serlo desde casa y desde su escuela o instituto.


Cuando hablamos con ellos, les decimos que no están solos, que estamos en su equipo. Pero no porque haremos lo que ellos quieran sino porque les escucharemos y atenderemos sus necesidades desde los conocimientos aportados por la pedagogía, psicología, neurología... Sí, estamos en su equipo: entrenamos juntos, les conocemos, les motivamos para que lleguen a ser la mejor versión de ellos mismos.


Los niños y niñas de altas capacidades forman parte de un colectivo heterogéneo. Tienen algunas características comunes pero hay que poner la lupa en cada uno de ellos y ellas para saber cómo son exactamente y qué necesitan, en qué punto están, y cómo podemos ayudarles y acompañarles para que desarrollen sus capacidades.


Sabemos por los estudiosos de las altas capacidades que hoy ya no hablamos de tener altas capacidades o no, ya ha quedado atrás el hecho de que el CI del 130 o más sea el indicador más importante, es un tema de grados y sabemos también que es dinámico. Las características como la curiosidad, la hipersensibilidad, el perfeccionismo, la intensidad, la baja tolerancia a la frustración... se mezclan con las características propias de cada individuo mostrando, por tanto, una gran diversidad.


Muchas veces, ellos tienen la impresión (y a menudo corresponde a la realidad) que están rodeados del equipo contrario. Algunos se sienten solos, incomprendidos, juzgados, en situaciones hostiles. La hipersensibilidad y la memoria juegan muchas veces en su contra. Las vivencias negativas quedan registradas. Algunos presuponen de entrada que siempre habrá dificultades, se desconfían de su habilidad social y de lo que pensarán los demás. Pero, sea como sea, debemos hacerles saber que la familia, los profesionales y los docentes, todos formamos parte de su equipo para que puedan crecer. 


* La imagen pertenece al ilustrador 72 kilos que nos ha permitido utilizar sus dibujos que encajan en los textos del blog. Aunque no están hechos para altas capacitats se pueden adaptar.



lunes, 10 de enero de 2022

!Volvemos a empezar! (Padres y Docentes)

 

Los hay que en este momento ya han abandonado aquellos buenos propósitos que se hicieron por año nuevo. Unos vuelven a fumar o ya han abandonado el gimnasio... propósitos que eran más bien deseos y que no iban acompañados de la fuerza de voluntad y constancia que se requería para que pasaran de deseos a realidades. Àlex Rovira dice (versión libre) que “los propósitos son deseos con un plus de decisión”.

Os propongo esta definición para reflexionar, y si lo deseáis para actuar. Cuando la leí, ahora que se celebran los veinte años de Harry Potter en el cine, pensé en sus varitas mágicas. A veces, de queremos convertir un deseo en un propósito sin la constancia y la decisión y no es posible. A los niños, jóvenes y adultos de altas capacidades; con toda su intensidad, también les pasa. A menudo pueden tener muchos conocimientos y habilidades y esto les puede dar una situación de privilegio, pero por otro lado, será su decisión y constancia actitud la que les ayude a dar el paso del pensar al hacer. Es el que nos convierte en personas. Es el que diferencia a aquellas personas con las que merece la pena convivir de aquellas con las que no apetece demasiado pero que las aguantamos por imperativo legal.

Cómo queremos ser? Nos estamos construyendo a diario, y no hay fórmulas mágicas de cambio, pero sí que podemos encontrar herramientas para que todos podamos ser la mejor versión de nosotros mismos. En el caso de las personas de altas capacidades su cerebro lo entiende todo, pero a menudo su rigidez o impulsividad no les permite el cambio. Hay que ir trabajando desde lo posible, despacio y con constancia para conseguir romper estas creencias limitantes que no les dejan crecer.

Hoy es nuestro primer día del 2022 en el blog. Volvemos a las buenas costumbres. Tendremos un post sobre altas capacidades los lunes y los jueves. Los martes tendremos las sugerencias o Programa Atlàntida amplio. Os deseamos un buen año. Este buen año lo hacemos nosotros, cada día. Hagamos entre todos un buen año, durante todo el año. Este es nuestro deseo en este primer post del 2022.