lunes, 14 de diciembre de 2020

La Carta a los Reyes ( Padres )

Nuestra tradición es cristiana y a pesar de lo que creamos personalmente llega el momento de hacer la Carta a los Reyes Magos. Nuestros niños y jóvenes no se quedan al margen... y si tenemos claro que son diferentes al resto de los niños, con las cosas que piden nos lo acaben de confirmar.


En la carta solemos escribir lo que nos gustaría, lo que creemos que necesitamos pero todos sabemos que los Reyes nos conocen bastante para filtrar y traernos lo que nos conviene.


Este año es muy distinto... no podremos ir a dar la carta a los Pajes Reales. Aun así, no perderemos la magia pero sí algunos detalles que ayudan a dar cuerpo a la historia. Este año O. pide a los Reyes un padre, y con la madre han pactado un plan B; como no puede ser, quiere estar toda la vida con mamá y la tata. Hace unos años la G quería una hermana y un perro pero el Paje Real fue muy claro: “Nosotros no llevamos seres vivos, es un género que no tocamos. Esto lo tienes que hablar con los papás.” y ella quedó muy conformada.


Otros piden deseos relacionados con sus grandes preguntas y sus preocupaciones: "que se acaben las guerras", "que todo el mundo sea feliz", "que nadie duerma en la calle", "que todo el mundo tenga un plato caliente", "que nadie sea molestado"...


Para algunos es muy difícil elegir elementos físicos... hay tantos... que algunos niños y niñas no pueden elegir. Porque hay posibilidades que no conocen y pueden ser superinteresantes... ¿cómo tienen que elegir?. Algunos lo dejan muy abierto. “No necesito nada, porque tengo todo el que necesito, pero si queéis traedme algo...”.


Hay quienes piden elementos para disfrutar todavía más con sus temas de interés: las ciencias (los dinosaurios, el espacio, los microorganismos, los animales extinguidos, los animales...); las manualidades (pinturas al óleo o acuarelas o témperas, rotuladores para hacer lettering, papeles...), los deportes, la literatura (libros y más libros), la historia (Egipto, Grecia o Roma, el Titanic, la aviación, las Guerras Mundiales...) ...


Los regalos que más ilusión suelen hacer són la posibilidad de vivir experiencias en familia o con amigos. Las hay en todos los campos y a todos los niveles. Recordáis que con ellos no trabajamos nunca con su edad sino con sus ganas de aprender.


Muchos museos proponen talleres familiares.


Podemos tener en cuenta la posibilidad de ver instalaciones poco habituales como el Sincrotrón Alba, el acelerador de partículas cerca de la Universidad Autónoma ; el Mare Nostrum y la supercomputació en el Campus Norte de la Universitat Politècnica de Catalunya; el Museo de Aeronáutica a Sabadell y a Le Bourget cerca de Paris; estudios de Arte de artistas; fábricas de yogures...


Los transportes son una buena opción y no siempre pensamos en ellos. Volar en globo; trenes especiales como el tren amarillo de la Cerdaña o el AVE a Madrid, o un pack de funiculares: Vallvidrera, Montjuic y Montserrat; los tranvías de Barcelona o el metro... o alquilar un coche especial para ir algún lugar.


Posibilidades deportivas que nos permitan dar pasos a pie o en bicicleta, ir a patinar, jugar a fútbol o a ping pong, hacer tiro con arco, ir a un rocódromo... aprender otros deportes o actividades como danzar, hacer un bautizo de mar para hacer vela o submarinismo...


Conocer la Naturaleza de nuestro entorno. Los Parques Naturales; ciudades y pueblos de costa, de montaña o de interior...


Las visitas ahora con el Covid están restringidas pero las podemos dar sin fecha o esperar en el año próximo. Ahora que ya están abiertos los teatros y cines... para algunos son la mejor de las opciones.


No hay nada como su cara el Día de Reyes por la mañana. No es el volumen de los regalos sino su adecuación. De hecho, durante todo el año hemos ido trabajando con ellos: el agradecimiento, el rebajar la exigencia, el ajustar las demandas...


A pesar del bombardeo publicitario en la televisión, en la radio, en los carteles y en los catálogos, algunos parecen impermeables y otros se dejan llevar, pero no porque los interese de verdad. Cuando decimos que menos es más, es una realidad.


Hablemos con ellos y propongamos opciones abiertas antes de escribir la carta solo desde su punto de vista. Un tiempo para pensar, buscar otras posibilidades. Así habremos abierto más el campo y conseguiremos que la carta se ajuste más a sus necesidades.


Y no olvidéis que quizás también deben traer un poco de carbón... porque a lo largo del año ha habido momentos de todo... ¿verdad?



No hay comentarios:

Publicar un comentario